Farmacia para la UMU, Psicología para la UCAM y Edificación en la UPCT

El Consejo de Gobierno aprueba ocho nuevas titulaciones universitarias que ya se impartirán el próximo curso
La Opinión
EFE El consejo de Gobierno aprobó ayer en su reunión celebrada en Torre Pacheco el decreto que autoriza la implantación de cinco títulos universitarios oficiales de Grado en la Universidad de Murcia (UMU), dos en la Universidad Católica San Antonio de Murcia (UCAM) y uno en la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT). Estas nuevas titulaciones comenzarán a impartirse el próximo curso, según informaron fuentes del Ejecutivo regional.
De este modo, para la Universidad de Murcia se autorizaron el Grado de Farmacia, de Educación Social, de Maestro en Educación Infantil, de Maestro en Educación Primaria y de Pedagogía. Para la UCAM fueron aprobados el Grado en Psicología y en Ingeniería en Sistemas de Comunicación. Y para la UPCT el Grado en Ingeniería de la Edificación.
Los Grados oficiales contenidos en este decreto cuentan con la evaluación e informes favorables de la Agencia Nacional de Evaluación y Acreditación (Aneca) y del Consejo Interuniversitario de la Región de Murcia, con la verificación del Consejo de Universidades. Una vez que el Decreto ha sido aprobado por el Consejo de Gobierno, la Consejería de Universidades, Empresa e Investigación comunicará al ministerio de Educación la autorización de estas enseñanzas de Grado para que se inscriban en el Registro de Universidades, Centros y Títulos.
También para el ámbito universitario, el Ejecutivo ha dado el visto bueno a un Decreto que convierte a la Región en la primera comunidad que regula, conforme al Espacio Europeo de Educación Superior, la implantación de las enseñanzas universitarias oficiales y establece el procedimiento de creación, modificación y supresión de centros en las universidades públicas y privadas de la Región de Murcia. De este modo, la Región se convierte en la primera comunidad autónoma que regula, en el ámbito de sus competencias, estas titulaciones académicas. Esta norma implica que las nuevas enseñanzas universitarias se han de corresponder con el nivel de demanda de lsa mismas. Además, deberán tener en cuenta su coste de implantación y un número mínimo de alumnos.