22 de marzo de 2011

El asesino sádico rompe a llorar al ser hallado culpable de matar a una prostituta

El jurado declara probado que estuvo en casa de la víctima y que la mató a cuchilladas, sin darle la menor oportunidad de defensa 

22.03.11 - 00:51 - 

Nunca ha dado muestras públicas de conmiseración hacia nadie, pero ayer sí lo hizo. Ayer 'Kike' lloró. Lloró por él mismo y por su suerte. Jesús Enrique Campuzano Munuera, el vecino de Cabezo de Torres, de 36 años, acusado de matar de tres cuchilladas a una prostituta con la única voluntad de procurarse placer sexual, sintió rodar las lágrimas por su rostro cuando el portavoz del jurado popular emitió su veredicto: culpable.
La decisión fue adoptada por unanimidad de los nueve miembros del tribunal popular, que consideraron probado que Jesús Enrique Campuzano estuvo en la casa de la prostituta dominicana, Priscila, de 39 años, en la madrugada del día 3 de junio de 2008, como lo demuestra el hecho de que su ADN fuera encontrado en el suelo del dormitorio y también en el cable de antena con el que fue maniatada la víctima.
Otro elemento que ha tenido gran importancia a la hora de situar a este hombre en el escenario del crimen es el hecho de que hacia las seis y media de la madrugada, poco antes de producirse el asesinato, Jesús Enrique Campuzano estuvo sacando dinero de un cajero de la plaza Santa Isabel de Murcia,; una zona muy cercana al domicilio de la mujer, quien residía en la calle Vinader.
Las explicaciones dadas por el acusado a lo largo del juicio no han logrado convencer al jurado. Así, este empleado de una carpintería metálica reconoció haber estado en el club de alterne 'Flamingo Star' de Puente Tocinos, en el que trabajaba Priscilla, e incluso confesó haber participado en un trío sexual, en el que no descartó que hubiera participado esa prostituta.
Sin embargo, rechazó de manera vehemente haber quedado con ella en su domicilio particular, a la salida de su turno de trabajo; haber sacado dinero con su tarjeta de crédito en un cajero de la Plaza de Santa Isabel, y mucho menos haberla maniatado con un cable y haberle asestado tres puñaladas. La explicación que dio al hecho de que su ADN apareciera en la vivienda fue que, si había estado con ella en el club, podría haberse producido «una contaminación» de ese objeto.
El cúmulo de pruebas e indicios recabados por la Policía contra Jesús Enrique Campuzano ha acabado siendo, sin embargo, demasiado convincente como para que el jurado tuviera en consideración las explicaciones del acusado. De tal manera que ayer dictaminó que es culpable del crimen y, además, que la mujer no tuvo la menor oportunidad de defenderse; dos elementos que dan por seguro que Jesús Enrique será condenado por asesinato con alevosía. Además, el jurado le ha negado la posibilidad de que pueda ser indultado.
Será el magistrado presidente del tribunal, Álvaro Castaño, quien redacte la sentencia, que muy probablemente contemplará una condena superior a los veinte años.
Jesús Enrique Campuzano, quien ya se vio implicado hace veinte años en el asesinato y violación múltiple de la niña Pilar Toledano, ha sido condenado también en los dos últimos años por otras dos violaciones y tiene otros juicios pendientes por hechos similares.

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