Recortes de ayudas del 80% colocan a asociaciones y ONG al borde del cierre

Los programas y servicios que no entran en el sistema de la Dependencia se quedan casi sin subvenciones

19.11.10 - 00:46 -

JAVIER PÉREZ PARRA jpparra@laverdad.es | MURCIA.

Los presupuestos regionales de 2011 darán un hachazo a las ayudas que reciben numerosas organizaciones sociales de la Región. El capítulo de subvenciones sufre un drástico recorte: del 74% en el caso del Instituto Murciano de Acción Social (IMAS) y del 66% en el resto de direcciones generales de la Consejería de Política Social. Es cierto que parte de esta caída se explica porque muchas subvenciones desaparecen para convertirse en contratos entre la Administración y las asociaciones en virtud de la ley de Dependencia. Pero los servicios y programas que no se encuadran en este campo se quedan en la cuerda floja.

Es lo que ocurre con la Federación de Asociaciones Murcianas de Personas con Discapacidad Física y/u Orgánica (Famdif), que atiende a centenares de personas aquejadas de párkinson, espina bífida y otras muchas patologías, y que sufre uno de los mayores recortes. La caída en su caso es del 75%, si se compara el presupuesto de la Comunidad Autónoma de 2011 y 2010. Son 461.156 euros menos que no encuentran compensación, porque esta federación apenas ofrece servicios relacionados con el sistema de la Dependencia. «Es probablemente la organización más perjudicada», reconoce Joaquín Barberá, presidente del Cermi (Comité de Representantes de Minusválidos), el órgano que representa a todas las federaciones regionales en el campo de la discapacidad. En una situación parecida se encontraría la Federación de Sordos de la Región (Fesormu). Se quedan sin casi 70.000 euros, y tendrán que funcionar con sólo 12.000 a lo largo de 2011. La tercera más perjudicada, según el Cermi, será Aspaym, que atiende a 347 familias con lesionados medulares o grandes discapacitados a su cargo, y que tendrá que subsistir con 9.000 euros.

«No sufrimos el problema»

Distinta es la situación de Feaps (Confederación Española de Organizaciones en Apoyo de Personas con Retraso Mental). Pierde 3,5 millones de euros en el capítulo de subvenciones, pero esa caída se explica porque son ayudas por plazas en centros de día que se abonarán ahora a través de un contrato. «Nosotros no hemos sufrido recortes», resume Barberá, que además de presidente del Cermi es vicepresidente de Feaps. Esto mismo ocurre con Fadis (Federación de Asociaciones de Disminuidos Psíquicos de la Comunidad de Murcia). Su caída del 87% se debe a esta misma causa. Mientras, en una situación intermedia se encuentra la Federación Murciana de Asociaciones de Familiares y Personas con Enfermedad Mental (Feafes). El hachazo es del 92%, pero en parte viene dado por la ley de Dependencia. Eso no impide que algunas de las asociaciones de esta federación sí se estén viendo muy afectadas, según ha podido saber 'La Verdad'.

Los programas y servicios que dependen de ayudas del IMAS no son los únicos afectados por los recortes. Los servicios de mediación familiar, que ayudan fundamentalmente a parejas en proceso de separación, se quedan a cero. Directamente desaparecerán a no ser que la Dirección General de Familia encuentre alguna otra vía de ayudas, algo que ya se está estudiando.

Exclusión social

Otro campo que sufre el tijeretazo es el de las organizaciones que trabajan con la exclusión social. Del listado de subvenciones nominativas ha desaparecido, de momento, la ayuda a La Casica, proyecto de Cáritas con niños en situación de riesgo social. Tampoco hay rastro de ayudas en este capítulo para la Fundación Sierra Minera, que trabaja en esta misma área.

'La Verdad' se puso ayer en contacto con la Consejería de Política Social para recabar su explicación, pero no obtuvo respuesta. El consejero Bascuñana presenta hoy en la Asamblea Regional los presupuestos de su departamento, que serán muy contestados en los escaños de la oposición. Será a la misma hora en que Famdif dé una rueda de prensa para denunciar los recortes. Además, la asociación Rascasa, dedicada a la atención de población marginal en barrios cartageneros como Lo Campano, escenificará a las puertas de la Asamblea la 'defunción' de las ayudas a la lucha contra la exclusión social. Será una jornada cargada de polémica.