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El Consejo de Administración de la inmobiliaria Colonial ha acordado este lunes trasladar su sede social de Barcelona a Madrid como consecuencia de la situación política en Cataluña.
Colonial, que desde el pasado mes de junio cotiza en el Ibex 35, el principal índice selectivo español, sigue así los pasos de otras grandes empresas catalanas que en los últimos días han optado por llevar sus sedes sociales fuera de Cataluña ante la posibilidad de que el Parlament apruebe este martes una declaración de independencia unilateral.
El grupo de concesiones Abertis y el grupo de telecomunicaciones Cellnex también están analizando el cambio de sede este lunes.
Por su parte, la multinacional catalana de hemoderivados Grifols no descarta modificar su domicilio social, situado actualmente en Cataluña, si el escenario político afectara a su negocio, en referencia a una posible declaración de independencia, tras el referéndum del 1 de octubre.
Fuentes de Grifols han asegurado a Efe que "actualmente no hay ninguna previsión para cambiar de ubicación ninguna de las sedes corporativas". "Sin embargo, en el hipotético supuesto de que la actual situación derivase en un nuevo escenario que pudiese afectar el curso normal de los negocios o de la situación financiera de la compañía, el consejo acordaría las medidas necesarias", han asegurado estas fuentes.
Grifols ha hecho público este pronunciamiento un día antes de que el presidente catalán, Carles Puigdemont, comparezca ante el Parlament para explicar si declara o no unilateralmente la independencia de Cataluña, después de haberse reunido el sábado con el presidente del Círculo de Economía, que le pidió que renunciara a la declaración unilateral porque "sería una bomba para la economía catalana".
De este modo, Grifols podría ser la única de las siete empresas catalanas del IBEX-35 que mantengan su sede social en Cataluña tras los anuncios de Caixabank (incluidas Criteria y La Caixa), Banco Sabadell y Gas Natural Fenosa de trasladar su domicilio social.
Éxodo de empresas
Por el momento, la última empresa que ha decidido salir de Cataluña es Torraspapel. El consejo de administración del fabricante y distribuidor de papel ha acordado también trasladar su sede social de Barcelona a Madrid. En un comunicado señala que ha tomado esta decisión "por la incertidumbre derivada por el actual contexto político catalán".
Otras compañías que ya han trasladado su sede fuera de Catalunya son Aguas de Barcelona (Agbar), Arquia Banca, Eurona, Oryzon Genomics, Proclinc Expert, Service Point Solutions, Banco Mediolanum, o la textil Dogi. También la aseguradora Catalana Occidente, y las grandes firmas del cava Freixenet y Codorníu se plantean mudarse para preservar los intereses de sus clientes, trabajadores y accionistas.
Otras importantes compañías, como Pronovias o Planeta, amenazaron hace tiempo con irse de Cataluña si ésta declaraba la independencia, mientras que las familias propietarias de las farmacéuticas Almirall e Indukern han expresado su preocupación por este eventual escenario.
Meses atrás ya habían trasladado su sede otras empresas radicadas en Cataluña como Naturhouse o Derby Hotels.
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