El Real Madrid acaba con el Dinamo de Zagreb en solo 20 minutos
Juego arrollador de un Madrid con seis novedades en la alineación
Benzema (2), Callejón (2), Higuaín y Özil autores de los tantos blancos
Radio Televisión EspañolaRAMÓN PIZARRO
22.11.2011 - 22:44h
El partido que jugó el Real Madrid ante el Dinamo de Zagreb (6-2), en la quinta jornada de la Liga de Campeones, puede resumirse en cuatro palabras: goleada en 20 minutos. Fue el tiempo que tardó el Madrid, líder invicto en el grupo D, en asegurarse llegar a octavos de final como primero. Lo hizo tras un cómodo partido ante el colista y en el que Mourinho empleó la rotación en su equipo.
Un 'revolucionario' Real Madrid
Los blancos hicieron una exhibición y destrozaron al Dinamo con tres goles en los primeros ocho minutos. Llovió sobre el Bernabéu desde el inicio del encuentro y lo que le cayó fue un chaparrón de goles al portero croata, Kelava, cuando su equipo ni siquiera había tocado el balón… y lo que todavía ofreció el Real Madrid, que enseñó los grandes recursos que tiene su plantilla.
El técnico portugués aprovechó la ocasión para meter seis cambios en el equipo: Adán, en la portería; Varane, en la defensa; el debut de Sahin, en medio del campo; y Callejón, un poco más arriba. Además entraron Coentrão y Lass Diarra, en los laterales y el dúo Benzema- Higuaín, que se volvió a mostrar letal en ataque.
Fue la “revolución” de un equipo que salió a todo gas, deseosos los jugadores no habituales de agradar al entrenador y a la afición. Así pasó con el debut de Sahin, aunque es complicado juzgar al turco ante un rival tan poco blando y esponjoso como fue este Dinamo de Zagreb.
Goles, goles, goles
El peligro llegó a raudales por la banda izquierda, una auténtica pesadilla para Cufré. Así, una trenzada acción entre Coentrão y Özil la culminó Benzema en el 1-0, al minuto y 24 segundos de juego.
No se habían enterado los croatas del primero y llegó el segundo. Benzema se la puso a Callejón, que batió al portero de un potente derechazo. Fue el 2-0 a los seis minutos.
Tercera jugada y tercer gol. A los ocho minutos, Higuaín le hizo un recorte a Calello y superó al desesperado guardameta croata. Fue el 3-0 ante el regocijo del público por el juego directo y efectivo de su equipo.
No bajó el ritmo el equipo español y siguió golpeando al rival desde la banda izquierda una y otra vez. En una entrada de Coentrão desde allí tuvo Higuaín el cuarto.
Ante un Dinamo inerme e inerte, Özil remató el 4-0 a los 20 minutos. El alemán disparó desde la frontal del área y recogió el despeje de Kelava para anotar.
La primera llegada de los croatas, de Beqiraj, la cortó Lass Diarra, tal vez en falta fuera del área; sin embargo, el conjunto blanco siguió mostrando su enorme vocación ofensiva y Özil, Higuaín, Callejón, Benzema… acumularon ocasiones de mayor o menor peligro.
Un oasis entre las montañas
Visto el calendario del Madrid en Liga, con Valencia, Atlético de Madrid y Barcelona casi seguidos, este choque ante el débil Dinamo de Zagreb fue algo así como la calma entre las tempestades. Una gran ocasión para que Mourinho diera descanso a alguno de sus actores principales. El resto del elenco madridista enseñó que se sabe bien el libreto.
Y entre los secundarios destacados: José María Callejón. El motrileño se lució en un pase largo de Varane para marcar el 5-0 a los 48 minutos, aprovechando la pasividad de la defensa croata.
También estuvo espléndido Callejón en una vaselina, a la hora de juego, que bien mereció el premio del gol. A esas alturas y con el partido resuelto, el Madrid cedió en la intensidad de su juego, pero en su voracidad goleadora.
El taconazo de Higuaín hacia Benzema lo transformó el francés en el sexto gol de su equipo a los 65 minutos. El francés realizó, minutos después, un acrobático remate que se estrelló en el larguero de la portería de Kelava.
Fin de la imbatibilidad
Pero el partido decayó y también el Real Madrid en su intensidad defensiva. Fruto de ello llegaron los dos goles del Dinamo. El primero en un espléndido testarazo deBeqiraj, que supuso el primer tanto de su equipo en esta fase de grupos y el fin de la imbatibilidad del Real Madrid.
El segundo, obra del recién incorporado Tomecak, que aprovechó el lío que se hizo la defensa madridista, ya casi sobre el minuto 90.
El Real Madrid logró un brillante triunfo en su partido 1500 en el Bernabéu, donde logró su victoria 250 en competiciones europeas y la duodécima consecutiva que alcanza Mourinho. El liderato está asegurado. Ahora a pensar en el derbi ante el Atlético de Madrid y en el clásico ante el Barcelona.
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