Dolores Sáez Luna, de 75 años, murió en el asalto a su domicilio de Archena en noviembre del 2o02; con la reciente detención de una pareja, el crimen está más cerca de ser esclarecido
Dolores Sáez Luna le dieron, a sus 75 años, muerte de perro.
Dolores Sáez Luna le dieron, a sus 75 años, muerte de perro.
La mataron a palos. Ocurrió hace casi un lustro, en la madrugada del 8 de noviembre del 2002, en el modesto domicilio, situado en el número 6 de la calle Spreáfrico del barrio del Sanatonio de Archena, que compartía con su hermana Carmen, de 66 años y disminuida física. Tres hombres penetraron en la vivienda por una puerta trasera, golpearon hasta la muerte a Dolores, maniataron y apalearon también a Carmen, revolvieron toda la casa, volcaron en el suelo el contenido de los cajones, tumbaron muebles, levantaron colchones... y se fueron sin la más importante posesión de las dos desvalidas mujeres: un sobre con 300 euros que guardaban en la casa y que, pese a no estar demasiado bien escondido, no fue hallado por los delincuentes.
Aunque desde el primer momento la principal hipótesis de la Policía Judicial de la Guardia Civil fue que el móvil del crimen era el robo, algunos datos sembraron dudas en los investigadores. Por un lado, no se entendía la brutal saña empleada contra las dos ancianas, a las que nadie hubiese elegido en principio por su aparente riqueza -vivían de manera más que modesta-; por otro, y al no haberse llevado el sobre con el dinero, especulaban con la posibilidad de que alguien hubiese querido simular un robo para encubrir lo que sería un crimen por otro motivos, como una posible venganza.
El asunto no comenzó a aclararse, siquiera de forma muy incipiente, hasta pasados cuatro meses, cuando los investigadores localizaron una huella dactilar que puso nombre y rostro a uno de los supuestos asesinos: Mohamed Kamel, argelino de 35 años, un tipo peligroso con una característica cicatriz en su mejilla derecha, que estaba siendo buscado por varios delitos y que residía ilegalmente en España. El tipo estaba en paradero desconocido y no fue hasta mucho después, en septiembre del año pasado, cuando fue detenido en un control rutinario en Logroño.
Una circunstancia que permitió seguir avanzando en la resolución del extraño homicidio.
Otros tres arrestados
No ha sido hasta ahora cuando ha trascendido que posteriormente fue detenido otro de los segundos implicados en el asesinato y muerte de la anciana: Naguib Brahim, de quien no se conocen más datos. Sí se ha sabido que este sospechoso aportó datos que han llevado a la detención de otras dos personas aparentemente relacionadas con estos hechos: se trata de una pareja residente en Orihuela, formada por el ciudadano marroquí Bouziane Boulesiar y su compañera, Carmen Sáez Álvarez, sobrina -como su primer apellido indica- de Dolores Sáez, la mujer apaleada hasta la muerte en Archena, y de su hermana Carmen, que también resultó gravemente heridas en el asalto.
Ayer, Naguib Brahim, Bouziane Boulesiar y Carmen Sáez fueron conducidos al juzgado de Molina de Segura por la Guardia Civil para ser sometidos a un careo. Aunque Naguib Brahim señaló a la pareja como supuestos inductores del robo, al haberles informado de que las dos mujeres guardaban gran cantidad de dinero en su casa, más tarde señaló que había dicho eso al sentirse amenazado por Mohamed Kamel, según señalaron fuentes próximas a la investigación judicial.
Manuel Maza de Ayala, letrado que ha asumido la defensa de la pareja de Orihuela, rechazó ayer, al término de esta prueba judicial y a preguntas de La Verdad, que sus clientes tengan cualquier relación con el asunto. Y añadió que va a solicitar la inmediata puesta en libertad de ambos.
Aunque desde el primer momento la principal hipótesis de la Policía Judicial de la Guardia Civil fue que el móvil del crimen era el robo, algunos datos sembraron dudas en los investigadores. Por un lado, no se entendía la brutal saña empleada contra las dos ancianas, a las que nadie hubiese elegido en principio por su aparente riqueza -vivían de manera más que modesta-; por otro, y al no haberse llevado el sobre con el dinero, especulaban con la posibilidad de que alguien hubiese querido simular un robo para encubrir lo que sería un crimen por otro motivos, como una posible venganza.
El asunto no comenzó a aclararse, siquiera de forma muy incipiente, hasta pasados cuatro meses, cuando los investigadores localizaron una huella dactilar que puso nombre y rostro a uno de los supuestos asesinos: Mohamed Kamel, argelino de 35 años, un tipo peligroso con una característica cicatriz en su mejilla derecha, que estaba siendo buscado por varios delitos y que residía ilegalmente en España. El tipo estaba en paradero desconocido y no fue hasta mucho después, en septiembre del año pasado, cuando fue detenido en un control rutinario en Logroño.
Una circunstancia que permitió seguir avanzando en la resolución del extraño homicidio.
Otros tres arrestados
No ha sido hasta ahora cuando ha trascendido que posteriormente fue detenido otro de los segundos implicados en el asesinato y muerte de la anciana: Naguib Brahim, de quien no se conocen más datos. Sí se ha sabido que este sospechoso aportó datos que han llevado a la detención de otras dos personas aparentemente relacionadas con estos hechos: se trata de una pareja residente en Orihuela, formada por el ciudadano marroquí Bouziane Boulesiar y su compañera, Carmen Sáez Álvarez, sobrina -como su primer apellido indica- de Dolores Sáez, la mujer apaleada hasta la muerte en Archena, y de su hermana Carmen, que también resultó gravemente heridas en el asalto.
Ayer, Naguib Brahim, Bouziane Boulesiar y Carmen Sáez fueron conducidos al juzgado de Molina de Segura por la Guardia Civil para ser sometidos a un careo. Aunque Naguib Brahim señaló a la pareja como supuestos inductores del robo, al haberles informado de que las dos mujeres guardaban gran cantidad de dinero en su casa, más tarde señaló que había dicho eso al sentirse amenazado por Mohamed Kamel, según señalaron fuentes próximas a la investigación judicial.
Manuel Maza de Ayala, letrado que ha asumido la defensa de la pareja de Orihuela, rechazó ayer, al término de esta prueba judicial y a preguntas de La Verdad, que sus clientes tengan cualquier relación con el asunto. Y añadió que va a solicitar la inmediata puesta en libertad de ambos.
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